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Publicado el 17 agosto, 2015
Tiempo de lectura 2 minutos
Para gestionar de manera integral los riesgos, en primer lugar debemos enumerar TODOS los proyectos, procesos, actividades o tareas realizados en la organización, posteriormente identificar TODOS los peligros relacionados a cada uno de ellos, luego evaluar los riesgos asociados a cada peligro, para posteriormente gestionarlos acorde a las políticas, objetivos y metas organizacionales que por supuesto están alineadas a un marco legal, así como a consideraciones económico-productivas y a criterios técnicos en el contexto interno de cada organización.
Ahora bien, ¿Qué se entiende por Peligro y Riesgo?.
Definiciones de Peligro:
Definiciones de Riesgo:
Si vemos en las definiciones anteriores, podemos darnos cuenta que existen conceptos y definiciones en las normas internacionales y en la propia legislación vigente que nos pueden dar pautas para un mejor entendimiento y aprovechamiento a la hora de gestionar los riesgos, sin embargo, la mayoría de las organizaciones no toman en cuenta estos conceptos o definiciones en su verdadera amplitud, ya que por lo general obvian o sustraen, en mayor o menor medida, los concernientes a equipos, procesos y ambiente.
Posiblemente, las organizaciones que cuentan con sistemas de gestión de prevención de riesgos laborales y medio ambiente, han integrado el concepto de peligros y aspectos ambientales y están gestionando los riesgos e impactos ambientales; pero no han integrado los equipos y procesos.
Idénticamente, las organizaciones que cuentan con sistemas integrados de gestión (seguridad, salud, medio ambiente y calidad), han incorporado el concepto de peligros a la salud y seguridad, aspectos ambientales y fallas de los procesos, por lo tanto, están gestionando los riesgos a la salud o la seguridad, los impactos ambientales y riesgos por fallas en los procesos; pero no han integrado a los equipos. Como venimos comentando, la mayoría de las organizaciones, no ha integrado alguno o varios de los elementos contemplados en las definiciones existentes, perdiendo de vista la oportunidad de implementar una gestión integral de los riesgos asociados a las personas, equipos, procesos y ambiente.
Por ello, el proceso para la gestión integral de riesgos debería estar alineado con la cultura, los procesos, la estructura y la estrategia de la organización. El contexto interno es todo aquello dentro de la organización que pueda tener influencia en la forma en que la organización gestionará los riesgos.
El contexto del proceso para la gestión del riesgo variará de acuerdo con las necesidades de la organización. Este contexto puede involucrar, entre otros:
Creando un contexto adecuado para el proceso de gestión integral de riesgos, tomando en cuenta la totalidad de los elementos y componentes del riesgo, y sobre todo la amplitud del alcance de las definiciones de Peligro y Riesgo, las organizaciones no sólo podrían definir mejor sus políticas, objetivos y metas para gestionar los riesgos, sino que definirán también sus alcances y profundidad, y asignarán mejor sus recursos para, en última instancia, gestionar de manera efectiva y eficiente todos los riesgos asociados a sus proyectos, procesos, actividades o tareas. Alcanzado los resultados en cada uno de estos campos con los consiguientes beneficios para los colaboradores, los clientes, el medio ambiente y la organización en general; garantizando la obtención continua de los resultados esperados por la organización.
La atención a estos y otros factores importantes debería ayudar a garantizar que el enfoque para la Gestión del Riesgo que se ha adoptado es el adecuado para las circunstancias, la organización y los riesgos que afectan el logro de sus objetivos.
Ing. Darwin Romero
Bibliografía
[1] SGSST OHSAS: 18001
[2] D.S. N° 005-2012-TR,
[3] D.S. N° 055-2010-EM,
[4] ISO Guía 73: 2009 Gestión de Riesgos – Vocabulario.
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