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Publicado el 4 julio, 2015
El tiempo estimado de lectura es de 5 minutos.
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¿Qué entendemos por Huella de Carbono?
La huella de carbono es un indicador que mide el impacto que provocan las actividades del ser humano sobre el cambio climático. De tal manera que, aplicada a una organización, muestra el efecto que tiene ésta sobre el clima, medido através de la cantidad total de GEI que emite, y representado en unidades equivalentes de dióxido de carbono (CO2e).
La Huella de Carbono busca calcular la cantidad de GEI que son emitidos directa o indirectamente a la atmósfera cada vez que se realiza una acción determinada y que las empresas puedan reducir los niveles de contaminación mediante un cálculo estandarizado de las emisiones durante los procesos productivos.
Indudablemente todas las actividades humanas generan una huella en términos de emisiones de gases de invernadero al ambiente. Las empresas no están exentas de ello, ya que todos los procesos que van desde la extracción de materias primas, a la elaboración de un producto, la llegada a los consumidores y su disposición final; dejan huella de carbono, y los países, así como las empresas, han comenzado a medirla.
Cada sector empresarial debería realizar un estudio sobre la cadena productiva para determinar dónde hay emisiones significativas.
¿Cuál es la diferencia entre Huella Ecológica y Huella de Carbono?
La huella ecológica contrasta la demanda de recursos naturales con la capacidad de la naturaleza para proveerlos (biocapacidad). En 2007, la huella ecológica de la humanidad era 1,5 ; es decir, se necesitaría un planeta y medio para regenerar los recursos y absorber las emisiones y desechos producidos por la humanidad cada año.
La huella de carbono, en cambio, se limita a un aspecto de la huella ecológica: el de las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) a lo largo del ciclo de vida de los productos, medidas en unidades de dióxido de carbono equivalente (CO2e). Este gas se ha tomado como referencia, pero existen otros cinco gases de efecto invernadero.
¿Qué significa ser Carbono Neutro?
Ser «carbono neutro» significa remover de la atmósfera tanto CO2e como el que agregamos. Una forma de hacerlo es comprando «compensación de carbono» y apoyar proyectos sostenibles como por ejemplo: los parques eólicos, solares (Energías Renovables) o proyectos de Reducción de Emisiones por Deforestación y Degradación de Bosques (REDD+), proyectos de cambios tecnológicos, etc. Esto ayuda a generar energía renovable y más económica, además reduce futuras emisiones de GEI y compensa lo que hemos añadido con nuestros traslados y consumo eléctrico actual.
¿Qué Beneficios se obtienen las Empresas que Gestionan su Huella de Carbono?
Medir la huella de carbono permite analizar la eficiencia operativa, reducir costos, mejorar la imagen y reputación de la empresa y acceder a líneas de crédito internacionales.
Además, genera ahorro energético y hace más eficientes a las empresas poniendo en evidencia oportunidades para el desarrollo de redes inteligentes y sistemas de gestión de energía.
Medir la huella de carbono, genera información que permite a las empresas optimizar el uso de los recursos y mejorar los procesos productivos.
Por el lado de los consumidores, la Certificación de huella de carbono aporta datos relevantes para decidir su compra.
Por qué es Importante la Certificación de la Huella de Carbono?
La medición de la huella de carbono y compensación de emisiones de GEI, actualmente se utiliza para diferenciar los productos, por la necesidad de mitigar el cambio climático; sin embargo, dentro de unos años será una exigencia de los mercados internacionales y podrían transformarse en una barrera a las exportaciones.
El certificado de la huella de carbono no es obligatorio, pero muchas empresas están interesadas en que sus productos lleven la etiqueta que certifica los valores de CO2 de sus productos y de esta manera los consumidores puedan optar por productos más sanos y menos contaminantes.
Algunos mercados europeos están siendo muy exigentes, privilegiando productos que no contribuyen al calentamiento global, comprobando que su huella de carbono es neutra.
Las exportaciones son evaluadas por los consumidores europeos o estadounidenses en función de su huella de carbono (a mayor huella, menor aceptación).
Algunos Tips para empezar a gestionar la Huella de Carbono en la empresa
Lo primero es conocer el consumo energético y evaluar su eficiencia mediante una auditoría energética. Luego hay que tomar medidas. Algunas requieren una inversión programada, como el cambio o acondicionamiento de equipos por otros de tecnologías más eficientes. Entre las medidas menos costosas se cuentan: el aprovechamiento de la luz natural y el uso de lamparitas de bajo consumo; los sistemas automáticos que regulan la iluminación y temperatura ambiente según horarios o cantidad de personas.
El traslado cotidiano a la empresa es una oportunidad de reducción de emisiones. Evitarlo con teletrabajo tiene sus ventajas: se ahorra tiempo y dinero en viáticos y comidas, lo que implica hasta un 20% de aumento relativo del salario, según datos de la consultora Jobing. También se incrementa la motivación y la productividad; y puede reducirse hasta el 64% sobre el costo anual de cada empleado por menor necesidad de metros cuadrados de oficinas, mantenimiento e impuestos y gastos de energía, librería, café y comunicaciones. La bicicleta y el carpooling son alternativas sustentables. Al compartir el auto para ir a la oficina se reduce el uso de combustible, estacionamiento, peajes, y se genera networking». El 70% de los vehículos tiene un solo pasajero, con lo que la posibilidad de reducir emisiones vía carpooling es enorme.
Un Caso Emblemático de Empresa
Google Green
La empresa mide su huella a nivel global, y desde hace cinco años esa medición da cero, según afirma Kate Hurowitz, gerente de Comunicaciones de Google Green. Con paneles solares en los techos de su casa matriz, sistemas de eficiencia energética e incentivos para ir a trabajar en bicicleta en sus filiales, Google elimina 10 mil toneladas de CO2 equivalentes al año. La estrategia de sustentabilidad del buscador se basa en la «nube verde»: los servicios para trabajar colaborativamente y a distancia permiten a empresas y consumidores un ahorro en traslados y energía del 85%.
Siete Pasos para Gestionar la Huella de Carbono en su Organización
A continuación presentaremos, referencialmente y en forma estructurada, la secuencia de pasos desarrollada por CEGESTI Costa Rica (2010)* para gestionar la Huella de Carbono en la Organización.
Paso 1. Asegurar el apoyo de empleados y directivos para la iniciativa de reducción de emisiones.
Como toda estrategia de gestión, su éxito dependerá del compromiso de todos los involucrados, pero principalmente de los altos directivos de la organización, ya que llevar a cabo este esfuerzo implicará la inversión de diversos recursos.
La reducción acertada de emisiones suele requerir:
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Para lograr este apoyo inicial, es necesario que el gestor del proyecto sepa “vender” la idea. Algunas razones para llevar a cabo un proyecto de esta envergadura son:
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Paso 2. Aprender qué es un inventario de GEI y cómo realizar uno.
Una vez obtenido el apoyo de la organización, se debe comprender en detalle en qué consiste la huella de carbono y cómo se calcula un inventario de GEI. Para ello, se han desarrollado diversas metodologías, entre las cuales se pueden citar:
La revisión y análisis de estas metodologías se puede realizar en el seno de cada organización, aunque por lo general se suele contratar asesoría externa en este servicio, debido a que algunos puntos de los protocolos (especialmente los relacionados con la delimitación del inventario y la realización de cálculos) pueden resultar técnicos y requieren un cierto grado de conocimiento en el tema.
Paso 3. Aprender qué datos se necesitan para calcular sus emisiones y dónde encontrarlos.
Una vez que la organización se ha familiarizado con las bases teóricas de lo que es la huella de carbono y el inventario de emisiones de GEI, se procede a recopilar toda la información histórica necesaria para tal fin.
Los datos, por lo general, incluyen consumo energético, consumo de combustibles, recorridos en automóvil y vuelos en avión, entre otros. Desde luego, este listado de fuentes de emisión variará dependiendo de la naturaleza de las operaciones de cada organización.
Paso 4. Calcular las emisiones de su organización. Para calcular las emisiones de una organización, existen dos grandes métodos:
Paso 5. Acordar una meta para la reducción de emisiones.
La siguiente etapa consiste en definir metas de reducción de emisiones en la organización, lo cual no debe llevarse a cabo a la ligera. Por el contrario, estas metas deben ser establecidas tomando en cuenta las opciones reales de mejora que posee la organización.
De esta forma, se debe seleccionar un año base que sirva como punto de referencia para futuras mediciones, y luego establecer metas de reducción de las emisiones para el corto y largo plazos.
Paso 6. Identificar e implementar las oportunidades para reducir las emisiones.
Consiste en elaborar planes de acción concretos, que permitan mitigar al máximo posible las fuentes de emisión identificadas y disminuir así las emisiones de la organización. Los mismos colaboradores de la empresa son los más indicados para plantear estos planes de acción, ya que poseen un mejor conocimiento acerca de las operaciones de la empresa y la competencia de sus colaboradores. Desde luego, el proceso se puede optimizar mediante la presencia de un facilitador, que sea a su vez conocedor del tema y pueda intervenir para ofrecer recomendaciones adicionales.
Una vez implementados los planes de acción que defina la organización, se esperaría una disminución de su huella de carbono, óptimamente controlándola por medio de un indicador relativo de seguimiento que conduzca a cambios orgánicos en la empresa (como podría ser toneladas de CO2e emitidas / # de colaboradores).
Sin embargo, será imposible llegar a un nivel de neutralidad de carbono (cero emisiones de GEI) únicamente implementando mejoras internas, ya que toda acción de desarrollo genera externalidades al ambiente. Por esta razón, la siguiente etapa del ciclo es la compra voluntaria de certificados de compensación de emisiones, equivalentes a toneladas de GEI liberadas.
Una compensación de emisiones consiste en un proyecto de reducción, evitación o remoción de emisiones de GEI fuera de las fronteras que se han definido para la organización. De esta forma, una empresa podría estar apoyando la protección de bosques, cambios tecnológicos en empresas más pequeñas y generación de electricidad con fuentes renovables, entre otros. Al apoyar estos proyectos, las reducciones, evitaciones o remociones de GEI que se lleven a cabo pueden contar como parte de la contabilidad de carbono de la empresa, y compensar así su huella.
Cabe recalcar que antes de compensar por medio de la compra de estos certificados, es conveniente disminuir las emisiones verdaderas por medio de programas internos, y recurrir a la compra de certificados únicamente para compensar aquellas emisiones que hayan sido imposibles de evitar.
Paso 7. Cosechar beneficios y alcanzar liderazgo.
Reportar su inventario de GEI públicamente. El último paso en el ciclo de gestión de la huella de carbono consiste en reportar el inventario de GEI que se llevó a cabo, y compartir de esta forma el progreso con los stakeholders de la empresa.
Si la empresa posee un informe anual de sostenibilidad, puede incluir un capítulo adicional dedicado a la huella de carbono. De no poseerlo, entonces se podría generar un documento por aparte.
En esta etapa, la organización cosechará los beneficios de haber realizado los pasos anteriores de manera satisfactoria.
Como toda gestión, la determinación de la huella de carbono debe llevar implícito un proceso de mejora continua. De esta forma, un primer estudio de esta naturaleza probablemente encuentre una serie de deficiencias en la manera en que la empresa opera. Corregir paulatinamente estas acciones es parte de la gestión del cambio climático que debe implementar la organización.
Ing. Natalia Vizcarra
Referencias bibliográficas